A la vecinita le encanta chupar pollas


Ella está caliente con su vecino, y aprovecha una de sus visitas para seducirlo, ya que se encuentran solos en la casa. La chica se saca la falda y deja que le toque el culo, tras lo cual también se quita el sostén para mostrarle las tetas. Con la putita toda desnuda el chico le mete bastante mano, y siente que su verga está completamente dura queriendo salirse de sus pantalones. La chica la libera y cuando la tiene entre manos práctica con ella su más caliente pasatiempo, comer pollas a lo loco. De este modo, el chico disfruta de una buena mamada al aire libre en la casa de la vecina.