Un gordito afortunado


Cachondas perdidas comienzan las dos golfas desnudas sobre la cama con un 69 tremendo, comiéndose los coñitos a la espera del novio de una de ellas… Cuando llega el afortunado, recibe una comida de polla perfecta a dos bocas y rápidamente empieza el show, con las dos putas a cuatro patas se va turnando, reventando sus agujeritos con unas embestidas tremendas culminando el trío con una corrida sobre el culo de su novia.