Seducida y follada duro


En la playa conocemos a una putita a la que nos llevamos a nuestro departamento, no sin antes tener una charla con ella para seducirla. Pronto está sobre nuestra cama con nosotros metiéndole mano en el coño, y con ella sacándonos la polla de los pantalones. La amasa bien con una mano mientras nos come los huevos, sin olvidarse de lamerla toda con hambre. La chica se libera de la poca ropa que tiene y se mete nuestro grueso rabo en su rajita, saltando sin parar una y otra vez primero por delante luego por detrás, dejándonos ver sus calientes nalgotas mientras juega.