Violet Myers sometida por dos vergas enormes


Dos negros van a atender muy bien a Violet Myers, y dejar sus agujeros bastante dilatados. Pero no nos vamos a ir por las ramas, pues nuestra historia comienza con estos dos amigos yendo por la ruta, encontrando a la pobre Violet varada en la ruta, con su coche descompuesto. Le hacen el favor de llevarla a su casa para que pueda llamar una grúa, ya que parece que la chica ha olvidado su móvil. Allí ella llama a la grúa, y mientras la espera, aprovecha la oportunidad de saborear las inmensas vergas de estos dos negros, que como premio por darle una mano, se cobran con hasta el último agujero libre de Violet.