Una polla gorda para Madison Ivy


Madison Ivy tiene las piernas levantadas y encajadas sobre el cuello de su amante, que no para de penetrarle el coño en esa postura tan estirada. Podemos ver como sus enormes tetas se mueven a ese ritmo de sexo duro, los dos entregados a follar hasta perder el conocimiento. Ella se estira como gata y se afirma a la cama, para hacer palanca con las piernas y menearse sobre ese enorme rabo. Toman una pequeña pausa para que ella se la chupe un poco, pero solo un poco, para luego arremeter nuevamente contra sus duras nalgas, una y otra y otra vez.