El hijastro de esta mujer está contento y cachondo con ella, porque es una mujer bien zorra que tiene demasiado amor para repartir, tanto para su nuevo marido como para su nuevo hijo. El chico la ve en la cocina mientras prepara el desayuno, desnuda por debajo de la bata. Ella lo seduce y deja que le meta mano, y como están solos en casa se van a la la habitación donde pueden estar cómodos sobre la cama. El chico se acuesta en ella con el rabo duro, y la madre se lo monta para darle cariño a lo bestia, haciéndolo correr en ella.
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