Una buena paja


Nada como una buena paja, y a su novia le encanta jugar con su polla, especialmente cuando le queda bien parada. Él se limita de disfrutar recostado en su silla, mientras que ella disfruta haciendo lo que le gusta, menearle el rabo para sacarle toda la leche. En algunos momentos se ve tentada de meterse esa polla en la boca pero se aguanta, pues ese día es pajas lo que su novio quiere así que ella frota y frota su verga para hacerlo correr. Cuando finalmente lo logra la leche se le escurre por los dedos, dejando a su chico más que satisfecho