Tres putitas prueban los agujeros de gloria


Cuando a esta rubia su amiga le dijo que en el sex shop que acababa de abrir en el centro había agujeros de gloria, no se demoró nada cuando fue a probarlos de primera mano, volviéndose loca. Llego junto con varias amigas, para probar todos esas descomunales pollas que brotan de la pared, y que prometen darles rabo hasta saciarlas. Si por casualidad uno de los hombres tras los agujeros se corre, basta con que otro compañero lo releve para que pueda saciar a estas mujeres, quienes resultan ser todas unas insaciables y seguramente, las mejores clientas de este lugar.