Rose Monroe necesita de su polvo navideño


Rose Monroe está más que lista para celebrar la navidad, con el atuendo ideal para calentar a su amante, que aún no despierta y parece tener bastante sueño. El hombre pide descansar un poco más, pero cuando finalmente logra levantarse, se encuentra a Rose tirada en el sofá con el culo envuelto para regalo, su regalo de navidad. El chico sonríe y sumerge la cabeza entre esas enormes nalgas, alboreando el cálido y limpio culito de la madura. Ella le devora el rabo, y se pone en cuatro, con el coño empapado, hambriento de la enorme y erecta polla del chico, que lo destroza dándole bien duro.