Pillada por un mirón


Mirón logra colar una cámara en un cambiador de mujeres, justo en el momento que una despampanante culona acaba de salir de las duchas tras tomar un baño. La vemos completamente desnuda desde abajo, y esas nalgas coloradas parecen pedir a gritos unas nalgadas. Ella ni se entera de que la están formando, y continúa secándose todo el cuerpo. La diversión termina cuando acaba de colocarse los pantalones cortos, y en ningún momento se entera de que la han estado espiando, para deleite del mirón que agrega esta cinta a su colección de chicas, esperando pacientemente en su lugar para ver si llega otra víctima.