Pelirroja ardiente se masturba con su almohada


Una pelirroja bien caliente tiene un sueño muy húmedo mientras duerme, por lo que despierta de pronto toda alborotada. Como no tiene a nadie durmiendo con ella para que le saque esa calentura que la recorre toda, no tiene otra que usar sus manos para darse placer. Se saca las mantas pues arde en calor, y lleva una de sus manos hasta su coño donde se mete los dedos, y con ellos se hurga en su interior frotándose el clítoris con fuerza. A medida que aumenta los juegos se va poniendo más cachonda por lo que tiene que bajarse la tanga para poder darse más duro, frotándose incluso contra su almohada al no poder controlarse.