Negrita tiene que montar una verga gigante


Una negrita tiene que trabajar como cada día en una porno, pero no está convencida con su nuevo amante, quizás por el descomunal tamaño de su rabo que piensa que, seguramente, la va a partir en dos. Baja el bañador del hombre, revelando un rabo realmente gordo y largo, y sigue sin convencerse de meterse eso, que es casi tan grueso como su pierna. Si quiere ganarse su dinero tiene que lidiar con eso, y lo primero que hace es chuparla. Finalmente se prepara para que se la metan y hay que hacerlo bien de a poco, no sea que tal polla la valla a partir en dos.