Mi novia me pone como una moto


Cuando este chico se puso de novio con esta belleza, habrá creído que estaba en un sueño. Y ahora que la tiene todo el tiempo que quiere para follar, es como viajar a otro mundo, pues está más buena que el pan, y lo mejor de todo es que no puede pasar un solo día sin recibir rabo, cosa que al chico le encanta. Los vemos a los dos besándose apasionadamente en una enorme cama, y a la tetona golosa chupándole la polla, sin quitarle la mirada de los ojos. El chico la premia comiéndole el coño, manoseándole las enormes tetas, para luego penetrarla bien duro y embestir con fuerza y a lo bestia.