Mi ardiente compañerita del trabajo


Me traigo a mi casa para follar a una compañera del trabajo, una gordi buena que me la tiene dura desde hace tiempo, y que recién ahora se ha dispuesto a follar conmigo. Me encanta como me come la polla, chupándola tan fuerte que parece que me la va a arrancar con esa boca de ventosa. Casi me vengo con la mamada, pero aun quiero probar ese coñito, por lo que me recuesto en la cama y dejo que ella me monte, apretándole esas tetas enormes y naturales que tiene. Gimiendo cachonda comienza a moverse cada vez más duro, cambiando de postura en postura, hasta que, sin contenerme, me vengo dentro de ella.