De día esta ardiente rubia trabaja en la playa, salvando la vida de quienes puedan estar en peligro de ahogarse. Luego de un largo día de trabajo le gusta llegar a su casa donde la espera su marido, al cual le gusta follar tanto como a ella. Juntos hacen un 69 comiéndose las entre piernas, dedicando tras esto la rubia un buen rato para comerle el rabo ella sola mirándolo a los ojos. Luego lo monta y se lo mete en el coño, moviendo las caderas al recibir la polla primero por el coño, luego por el culo, tragándose toda la leche cuando se la sueltan en la cara.
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