Un hombre se mete a la casa de la vecina para espiarla, y cuando está hurgando en sus cosas escucha como ella llega, por lo que se esconde para que no lo vea. La chica se recuesta en la cama cansada, pero por lo que el chico puede ver también caliente, porque se comienza a sacar la ropa a la vez que se toca un poco. La mujer gime como loca mientras se masturba, pero acaba encontrando al vecino metido en el armario meneándose el ganso, por lo que lo saca de allí. Su castigo, o quizá su premio, follársela a ella.
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