Un viejo se folla a una morena


Una morena buenísima tiene fetiche con los hombres mayores, y mientras folla con uno, no puede dejar de imaginarse que el hombre la está follando salvajemente. Ella se muerde los labios, y acaba insinuándole sus intenciones al viejo, por lo que este, fascinado con semejante morena, comienza a besarse con ella. La tienta en el escritorio entre besos, y le acaricia las piernas, sacándose toda la boca. Ella le chupa su pequeña polla, que mete entre sus piernas tras terminar de sacarse la ropa y acomodarse sobre el escritorio. El viejo aprovecha esa oportunidad y se toma su tiempo para darle rabo, practicando toda clase de calientes posturas.